La Plataforma per la Dignitat del Llaurador reúne a casi 4.000 personas en su cuarta protesta citrícola
La Plataforma per la Dignitat del Llaurador ha reunido hoy en las calles de València a cerca de 4.000 personas en una nueva protesta por la crisis citrícola y la demanda de soluciones. Los manifestantes, bajo el lema "Per la defensa de la nostra citricultura", se han concentrado en la Estación del Norte para iniciar un recorrido por las principales calles de la ciudad hasta llegar a la Delegación del Gobierno.
En las puertas de la Delegación se ha procedido a la lectura de un manifiesto en forma de decálogo con las reivindicaciones que serán trasladadas también a todos los partidos políticos con objeto de que las incorporen en sus programas electorales para todos los comicios del 28 de abril y del 26 de mayo.
La Plataforma está formada desde su creación hace dos años por 16 Ayuntamientos de la Plana Baixa, las organizaciones agrarias LA UNIÓ de Llauradors y FEPAC-ASAJA, Cooperativas Agrarias-Intercoop de la provincia de Castellón, la Asociación de Pozos de Riego de de Castellón, el Sindicato Central de Aguas del Río Mijares, la Asociación de Distribuidores y Aplicadores de Plaguicidas de la provincia de Castellón y la Asociación de Comercios y Cooperativas de Exportación de la provincia de Castellón.
Desde esa fecha ha seguido ampliando el espectro de adhesiones hasta contar ya con el apoyo de 103 localidades de zonas citrícolas de la Comunitat Valenciana y en esta ocasión se han sumado también los sindicatos CCOO y UGT.
La de hoy es ya la cuarta protesta protagonizada por la Plataforma per la Dignitat del Llaurador, tras las realizadas el pasado 18 de diciembre y 21 de enero y 25 de febrero.
Paralelamente a la protesta, la Plataforma ha iniciado una campaña de recogida de firmas, ante la poca sensibilidad por parte de las Administraciones y dada la grave situación de la citricultura en la Comunitat Valenciana cuyos productores han tenido ya numerosas pérdidas directas.
En esta campaña de firmas se pide una revisión y renegociación de todos los acuerdos firmados entre la Unión Europea y países terceros en relación a la importación de cítricos. Así mismo se reclama garantizar la salud de los consumidores europeos informando de las sustancias prohibidas por la Unión Europea con las que están tratados los cítricos importados de terceros países.
Del mismo modo se demanda garantizar la sanidad vegetal de los cítricos europeos, adoptando las medidas necesarias para que no entren plagas y enfermedades de terceros países; asegurar el cumplimiento de la ley de la Cadena Alimentaria con la finalidad de garantizar una renta digna al agricultor y finalmente garantizar el etiquetado correcto del origen y variedad del producto.
